El Portomar recibió al equipo santiagués el domingo a la tarde para despedir el Carnaval.
Nuestro rival es un equipo aguerrido, que está mejorando mes a mes y que nunca tira la toalla, peleando hasta el final. Empezó nuestro cadete defendiendo muy fuerte y dejando en tan sólo dos puntos al Pío XII en el primer cuarto, poniendo en juego mucho esfuerzo y agresividad en cada situación. A partir de ahí el partido se igualó, el esfuerzo físico y mental que requería cada defensa se pagaba en ataque con selecciones desacertadas o tomas de decisión imprecisas. El rival vio la debilidad y se cerró en una zona que puso en aprietos al Portomar que erraba los tiros cercanos y lejanos, pero lo peor era el dejar de correr y pararse para atacar la zona. Su defensa no nos creó problemas en sí misma, sino que nos cambió el ritmo de juego. No fue un buen partido, y como se suele decir, cuando un equipo no juega bien y vence, es porque existe una superioridad. Felicitar por su esfuerzo también al Pïo XII que siempre juega fuerte y con pasión.
Desde la casa Cortegada reconocemos el trabajo desarrollado en Santiago y a su entrenador Antón y técnicos.
La reflexión es que Portomar Cortegada se ha vuelto un buen equipo y además temido, por eso, posiblemente sólo dos clubs en Galicia nos vayan a jugar cara a cara, de frente y que darán buenos encuentros que engrandezcan el basket. Partidos que aunque se pierdan, hacen mejorar el baloncesto de cada una y la autoestima de todas. La zona es un recurso más y está bien hacerla, cada uno usa las armas que cree convenientes y en la medida oportuna, pero cuando jugamos partido tras partido y los equipos se protegen de nuestro basket abierto cerrándose atrás, resulta difícil ver un juego vistoso donde todas participen. Deseando jugar contra Ensino y Peleteiro que demuestran valentía y capacidad en sus posibilidades, y que favorecen un baloncesto rico, vamos adaptándonos a las propuestas de cada partido. Enhorabuena por el esfuerzo y, pensando en mantener la concentración en las cosas que son controlables por cada jugadora para seguir mejorando, una experiencia más para las de Vilagarcía.
La nota simpática del partido fue el asalto de las “FLACAS” que calentaron en familia en la antesala del encuentro: “Para el recuerdo la rueda loca de entradas”
Gracias padres y madres por estar ahí siempre, y por tener la cara de cariño y entendimiento cuando las cosas se ponen peor, sin vosotros esto no sería posible.