El Martis Cortegada hizo gala de una defensa brillante del juego interior del Porriño, pero se quedó corto a la hora del acierto ofensivo. La defensa de las pivots del Canteiras, que eran jugadoras de un tamaño muy superior a las nuestras, fue perfecta. Las anularon al poste bajo y consiguieron a partir del minuto 5 del encuentro, también dejarlas fuera de la opción de rebote ofensivo. En lo que se refiere al juego ofensivo de las locales, quedó reflejada la buena sintonía entre el equipo para desarrollar situaciones trabajadas a diario. Pero la eficiencia no basta para salvar un encuentro, así que tras la ausencia de eficacia de cara a finalizar en canasta buenas situaciones de ataque, sobre todo en el parcial del tercer cuarto 2-15. Hizo que el resultado cayera del lado de las visitantes con una ventaja de más quince a su favor al finalizar el encuentro.