En un horario inhabitual de sábado mañana y con la baja de varias jugadoras recibimos al equipo de Porriño que se encontró con el mismo problema de alineaciones por la fecha. Desde el inicio nuestro equipo fue a por el partido, apretando defensivamente y atacando el aro con mucha iniciativa. Posiblemente en el mejor arranque de la temporada, anotamos en contraataque, en penetraciones con adicional, en juego estático y lanzando de larga distancia. Hasta 23 puntos anotó nuestro cadete en el primer cuarto en una clara intención de asumir responsabilidades y no dejar que el rival se impusiese en el juego. El rebote era una batalla que ganábamos, y no pudiendo hacer segundos tiros Porriño, limitábamos sus opciones. En el segundo cuarto nos recortaron distancias pues era muy difícil continuar con tanto acierto, y debido a nuestros despistes a la hora de hacer el balance defensivo, ya que le pusimos en bandeja meternos varias canastas en contraataque. A partir de entonces el partido se igualó, y un fin de semana más, entramos en el cara y cruz habitual.
En el final, el equilibrio en los tiros cerca del aro con nuestras jugadoras altas y las penetraciones y tiros de lejos de las exteriores, posibilitó la victoria que nos está siendo tan esquiva. Ha sido el enésimo final ajustado al que estamos abonados, y que tanto nos enseña, pues el dominio de estas situaciones nos obliga a controlar los nervios y concentrarnos en el juego.
Enhorabuena y a seguir aprendiendo!