La escolta vilagarciana Sara Gómez se convirtió ayer de forma oficial en el inesperado refuerzo estelar del AD Cortegada Conservas Portomar. La jugadora de 27 años estaba entrenándose con el equipo que dirige Rubén Domínguez desde principios de agosto a la espera de encontrar un equipo en Liga Femenina. Ante la falta de ofertas interesantes, la jugadora se ha decantado por formalizar su licencia con el club donde se formó a la espera de recibir una propuesta que le permita competir a su nivel, en Liga Femenina. Sara Gómez firma de esta forma hasta diciembre con el Conservas Portomar.
Este fichaje circunstancial es una magnífica noticia para la entidad por varios motivos. Primero porque se trata de una jugadora de la cantera, el mayor talento que brotó del trabajo de formación en las últimas décadas en el club. Sara regresa estos meses para ser ahora un referente y un espejo en el que se mirarán otras jóvenes jugadoras. En segundo lugar se trata de un refuerzo de lujo para el nivel deportivo que existe en Liga Femenina 2. Sara Gómez jugó con el Cortegada en esta categoría siendo muy joven y logrando el ascenso, previo paso a una etapa en la que se afianzó en Liga Femenina, tanto en el propio club vilagarciano como posteriormente en el RC Celta y el Obenasa Navarra. Con el conjunto de Pamplona disputó el pasado año los cuartos de final por el título, pero solo unos meses después vio como el equipo desaparecía por motivos económicos.
Por último, el fichaje de Sara Gómez representa un gran reclamo para la afición del AD Cortegada, que disfrutará durante la primera parte de la competición en Liga Femenina de la jugadora más querida y admirada por los seguidores. Sara Gómez vuelve en una temporada donde la identificación de la afición con el equipo será máxima tras la apuesta por de un proyecto de cantera y de austeridad económica.
Fuente: Dario de Arousa