Los problemas con la licencia de la jugadora del Feel no se solucionan
El castigo de Amy Syll ya ha sobrepasado su primer mes. Los problemas con su licencia no acaban de solucionarse y la moral de la jugadora empieza a estar bajo mínimos. La de sus compañeras se mantiene. O la mantienen los resultados porque el día a día del equipo en los entrenamientos son muy duros.
¿Por qué no puede jugar Amy los partidos?
A raíz de una denuncia de la Federación de Senegal, la FIBA paralizó la licencia de la jugadora y ordenó a la FEB que prohibiera que jugara más partidos mientras no se aclarara la situación. Amy no ha podido disputar los duelos contra el Ferrol, Oviedo y Arxil.
¿Cuál es el problema que denunció ante la FIBA la Federación de Senegal?
El organismo senegalés insiste en que la documentación que se presentó en el momento de inscribir a Amy como jugadora del Cortegada es falsa. Tanto el sello como la firma que aparecen en los papeles.
¿Cuál es la explicación que ofrece el club y qué gestiones ha hecho?
En un primer momento, el Cortegada apuntaba a una posible confusión con otra Amy Syll. Incidía la directiva vilagarciana en que el problema era con otra jugadora del mismo nombre que había disputado un torneo internacional. Por ello consiguió documentación de la «otra» Amy -incluso una nómina de su actual trabajo- y envió también una declaración jurada de la baloncestista del Feel Cortegada para intentar aclarar lo que en Vilagarcía se consideraba como una simple confusión. El Cortegada filtró la pasada semana un supuesto arreglo con la Federación de Senegal pero es la FIBA quien decide una vez que el asunto está en sus manos.
¿Cómo es posible que, tras un mes, el caso no se haya desbloqueado?
Por varias razones. En primer lugar porque todo saltó justo antes del parón navideño. Además, llegado ya el 2013, el funcionario de la FIBA encargado de dirimir este tipo de situaciones tuvo una semana más de vacaciones. Y, lo más importante, en Ginebra no parecen estar muy seguros de quién tiene razón.
¿Cómo está la situación a día de hoy?
Fuentes de la Federación Española consultadas esta semana afirmaban que la FIBA había solicitado más documentación al Cortegada en una comunicación en la que afirmaba que «seguían teniendo muchas dudas». Según esas mismas fuentes, el asunto «de momento, está parado».
¿Cómo lleva la jugadora todo este follón?
Amy está «destrozada», según apunta su entrenador Pepe Vázquez. La jugadora ha perdido la alegría, está triste y preocupada porque no le dejan hacer lo que más le gusta.
Fuente: La Voz de Galicia