Ayer recibíamos una de las noticias más tristes, la muerte de Helena Mariño… Cuando todavía le quedaba tanto por vivir. Y, la verdad que nos quedamos sin palabras. Hace tan solo 10 días estábamos despidiendo a Araceli, y esta noche a Helena. Dos figuras importantísimas en nuestro Club y de las que siempre guardaremos un grato recuerdo.
Durante esta noche se nos pasaron mil imágenes por la cabeza, y recordábamos a Helena luciendo el 8 en su espalda y peleando contra quién se le pusiera delante… Porque esa era la esencia de Helena, tanto dentro como fuera de la pista, siempre peleaba ante las adversidades. Daba igual si la pivot de enfrente medía 15 centímetros más, ella no dejaba que se llevara ningún rebote sin esfuerzo. Y, lo mismo hacía en su vida personal…
Todos los que tuvimos la suerte de estar en algún momento cerca de Helena, pudimos conocer su cultura del esfuerzo. Que junto con la inteligencia, se convirtieron en la esencia del 8 de aquel Inelga/ Cortegada que tantas cosas buenas nos dieron. Y que fueron, de alguna manera, el origen de todo lo que se ha conseguido hasta hoy.
Helena marcó el baloncesto femenino en Vilagarcía, durante su época como jugadora, entrenadora… Y en los últimos años como entrenadora directiva del C.B. Vilagarcía (a quién mandamos un fuerte abrazo)… Por lo que estamos seguros que su recuerdo seguirá siempre entre nosotros.
Solo podemos mandar un fuerte abrazo a Ricardo, su pareja, y a Lúa y a Lois, sus hijos… Así como a toda su familia y sus amigos.
Que la tierra te sea leve, Helena