El susto de todas las semanas para el Feel Cortegada llegó en la sesión del martes. Casi cuando estaba acabando, para redondear la tragedia. Tras un salto, Montse Gilabert apoyó mal en la caída y se torció la rodilla. La que tiene fastidiada, claro, que estas cosas siempre salen del revés. La primera exploración desveló un ligero daño en el ligamento anterior, que se suma al menisco roto. En definitiva que la capitana va a llegar muy justa para poder afrontar el partido de mañana contra el Celta Selmark en la cancha viguesa.
La enfermería del Feel Cortegada está a rebosar. Además del incidente ya relatado de Montse, Salomé está también entre algodones. La escolta arrastra importantes molestias en un aductor, que se complican también por sus estudios, ya que está en plena fase de pruebas físicas de la licenciatura que está cursando.
Ylenia, por su parte, sigue con el proceso de recuperación de la rotura de fibras y ahora tiene también una sobrecarga en los gemelos debido al esfuerzo del pasado sábado.
Así las cosas, el trabajo diario en los entrenamientos está siendo toda una aventura por la escasez de efectivos y, seguramente, tendrá influencia en el tramo final de la competición.
Por lo que respecta al asunto Amy Syll, en el club siguen confiando en que el tema se solucione. Al parecer, la situación está a punto de aclararse definitivamente y los indicios, según fuentes del club, apuntan al propio agente de la baloncestistas como el origen de todos los problemas. Con el culpable localizado falta que aparezca la solución pero en el Cortegada creen que el asunto puede desbloquearse en cualquier momento.
Fuente: La Voz de Galicia