Rubén Domínguez (18-6-1973) ha concluido su primera temporada al frente del primer equipo del Cortegada, una temporada que comenzó con muchas dudas y que ha terminado con un magnífico sabor de boca. Y un año que podría tener continuidad porque la directiva está interesada en seguir contando con el mismo cuerpo técnico.
– ¿Qué nota le pone a la temporada del equipo?
– Creo que cumplimos con notable. Nuestra expectativa era seguir en esta liga y hacer crecer a jugadoras que nunca habían jugado a este nivel, y hemos cumplido en ambos aspectos.
– El reto para usted como entrenador era mayúsculo con un equipo plagado de jugadoras jóvenes e inexpertas.
– El reto era ir ayudando a las jugadoras a ir avanzando, a crecer. A jugadoras sin experiencia en este nivel y a otras como Alejandra Nogueira que volvía tras estar en una liga inferior, o como Laura Aliaga tras un año y medio lesionada, o Andrea y Salomé que debían dar un salto hacia delante. Además Mame Sy no estuvo desde el inicio y cuando pensábamos que Sara Gómez nos iba a ayudar se la llevaron después de jugar un solo partido en pretemporada. La verdad es que no ha sido fácil y nos ha obligado a ir reinventando el trabajo.
– ¿Y cuál ha sido la respuesta del grupo ante esa dificultad?
– Estoy muy contento con el grupo porque no era fácil, pero fueron implicándose en el trabajo y creyendo en lo que estábamos haciendo. Al principio nos costó ser competitivos y tuvimos dificultades en muchos momentos, pero siempre con las ideas claras y creyendo en ir progresando.
– Citó antes a varias jugadoras, pero no a Montse Gilabert, supongo que su papel ha sido determinante.
– Tiene un porcentaje muy grande del éxito. Ella ha puesto la calma, la tranquilidad y la experiencia. Aguantó el grupo cuando las cosas no iban bien y es evidente que ha tenido una gran influencia en el equipo.
– ¿Qué faltó para haber llegado al play-off cuando se plantearon pelear por él?
– Faltó que entrase la pelota. En Pontevedra no hubo acierto. Pero sabíamos que no teníamos margen de error y aunque lo ganásemos todo tampoco habríamos entrado. Pero más allá de estar o no en la fase, lo bueno es que las jugadoras aceptasen el reto y trabajasen para alcanzarlo.
– Se preveía un año difícil en todos los aspectos. También se podía dudar del respaldo de la afición por aquello de las derrotas. ¿Cómo valora la buena respuesta del público?
– Hay que estar muy agradecidos. Nos han ayudado en cada partido. También es cierto que es más fácil identificarse con un equipo de jugadoras que vienes viendo jugar desde pequeñas. Hace muchos años que no hay tantas jugadoras de Vilagarcía en el equipo e incluso las que jugaron menos han ayudado mucho porque los entrenamientos son básicos en el crecimiento de un equipo. La verdad es que el apoyo del público nos ayudó a rendir mejor y espero que hayan disfrutado como lo hemos hecho nosotros en la pista.
– Y tras hablar de lo que ha pasado esta temporada, hablemos ahora del futuro. La directiva parece querer renovarle, ¿seguirá Rubén Domínguez en el Portomar Cortegada?
– Es satisfactorio que estén contentos con el trabajo y que quieran que continúe. Nos sentaremos a hablar porque hay que ver cual es el reto que se plantea ahora. Y hay que pensar que siempre hay que intentar progresar.
– Este año se está hablando mucho de los efectos que la crisis económica está teniendo en el baloncesto, y especialmente en el femenino. Efectos que se han visto en el Cortegada. ¿Cree que todo es negativo?
– Depende de la perspectiva desde donde se analice el tema. Es cierto que hay un montón de jugadoras que juegan en LF y LF2 que no lo harían si no hubiese crisis porque siempre que hay dinero casi todo se va para jugadoras de fuera. Pero lo que está claro es que ahora hay muchas en ambas ligas que son buenas y es muy bueno para la salud del baloncesto femenino español, aunque pueda bajar el nivel de la competición.
Fuente: Diario de Arousa
Foto: Gonzalo Salgado