El conjunto avilesino nunca entró en el partido y acabó cayendo por 37 puntos frente al Portomar Cortegada
Hacía tiempo que el Adba no perdía por treinta y siete puntos y eso fue lo que le ocurrió ayer en El Quirinal frente al Portomar Cortegada, que se mostró muy superior de principio a fin (51-88). El conjunto avilesino no daba el encuentro por perdido y en la previa tenía bastantes ilusiones puestas, sobre todo después de ganar al Universidad de Valladolid la pasada jornada, pero nada salió como estaba previsto.
El Adba no defendió bien en todo el partido, sufrió mucho el lanzamiento exterior visitante y al descanso ya estaba once abajo en el marcador. Una fascitis plantar truncó la progresión de la junior Andrea Pujol, mejor directora del equipo, y Yolanda Mijares está racionalizando su participación, dándole más minutos a una Analía Casado que hoy realizó uno de sus mejores partidos, y no sólo por sus siete puntos.
El partido se rompió en el tercer cuarto y el Portomar Cortegada hizo sangre en el último periodo. Lo cierto es que el Adba no está al nivel con el que comenzó la Liga y parece que las jóvenes jugadoras del conjunto avilesino están acusando, en términos de confianza, la mala racha de resultados que parecía haberse cortado en Valladolid.
De todas formas, el último encuentro de 2014 tendrá lugar el próximo sábado en Ourense y se trata de un partido propicio para que las avilesinas regresen a la senda de la victoria, aunque ningún partido es fácil, y menos en esta categoría.
Otra de las claves del partido de ayer en El Quirinal fue lo bien estudiado que tenían al Adba desde Vilagarcía, ya que Anna Boleda, que no jugó mucho, estuvo muy vigilada y apenas pudo lanzar con comodidad en todo el encuentro.
El Comercio